He leído el libro «Educar con Inteligencia Emocional» de Maurice J. Elías, Steven E. Tobías y Brian S. Friedlander en la que proponen una caja llena de abrazos como un juego en familia.
¿Por qué abrazos? Los autores contestan.
⭐ Porque los abrazos curan.
⭐ Los abrazos ayudan a mantener unida una familia.
⭐ Un abrazo constituye un modo seguro de compartir sentimientos de afecto y
⭐ Supone una expresión de inteligencia emocional sin palabras.
¿Te gustaría tener una caja llena de abrazos? ¡Estupendo! Los materiales que necesitas son los siguientes:
⭐ Una caja pequeña que tengas por casa.
⭐ Papel craft para envolver la caja o cualquier otro papel.
⭐ Lápices, témperas o rotuladores para decorar.
⭐ Tarjetas para dar y recibir los abrazos. (Al final tienes el botón para que te lo descargues)
Alguno ejemplos de «Tarjetas de abrazos» son las que ofrece el libro y otras las he añadido:
- Abrazo largo
- Abrazo y un salto
- Abrazo y golpe de cadera
- Abrazo y vuelta
- Abrazo y un beso
- Un abrazo de mamá
- Abrazo y chocar las cinco
- Abrazo y una canción
- Abrazo de bocadillo
- Un abrazo de papá
- Abrazo doble
- Abrazo y cuento
- Abrazo con cosquillas
- Abrazo y baile
- Abrazo sin manos
- Abrazo y guiño de ojos
Una vez elaborado y preparado el material, el juego consiste en que cada miembro de la familia va extrayendo una tarjeta y ella o él tendrá que dar y recibir ese tipo de abrazo por parte de todos.
El juego de los abrazos lo puedes encontrar dentro de la CAJA DE LAS EMOCIONES que tienes a continuación:
“La vida en familia supone nuestra primera escuela para el aprendizaje emocional: en tan íntimo caldero aprendemos qué sentimientos abrigar hacia nosotros mismos y cómo reaccionarán otros a tales sentimientos; cómo pensar acerca de esos sentimientos y qué elecciones tenemos a la hora de reaccionar; cómo interpretar y expresar esperanzas y temores.
Esta escuela emocional funciona no sólo a través de lo que los padres dicen o hacen directamente a los niños, sino también en los modelos que ofrecen a la hora de manejar sus propios sentimientos y aquellos que tienen lugar entre marido y mujer”
DANIEL GOLEMAN
¡Hasta la próxima familia!