Existen muchas actividades que favorecen el aprendizaje de la lectoescritura:
- de articulación,
- de discriminación visual y auditiva,
- espacial,
- emocional,
- de desarrollo del lenguaje oral,
- actividades para trabajar los trazos,
- de pronunciación,
- actividades que conducen a un adecuado desarrollo psicomotriz,
- etcétera.
El manipular libros, cuentos, revistas y todo tipo de material impreso va a favorecer el gusto por producir mensajes orales cada vez más precisos y amplios y, posteriormente, facilitará la aparición de los primeros mensajes escritos.
A través de los cuentos los pequeños tienen la posibilidad de conocer y observar paisajes, lugares, culturas, personas, animales, objetos…
Con ellos, podemos trabajar con los niños y las niñas comentando las ilustraciones, los personajes, describiendo paisajes, objetos, vestidos, imitar acciones y gestos, dibujar y colorear a algún personaje, iniciarlos en la comprensión lectora, aumentar el vocabulario, etcétera.
El emplear diariamente un tiempo para la lectura es muy importante y limitar el tiempo que dedican a la televisión o videojuegos.
Lo ideal sería ofrecerles libros llamativos, con ilustraciones y colores, que utilicen un lenguaje ajustado a sus capacidades, con frases claras y bien estructuradas y que, estimulen y desarrollen la capacidad de atención y de memoria.
Además, son adecuadas las siguientes actividades:
- La educación física, ya que ello desarrolla cualidades motrices, la orientación espacial, el esquema corporal, etcétera.
- Hablarles de forma clara y con una pronunciación correcta.
- Lectura de cuentos en voz alta.
- Recitar y memorizar poesías sencillas, adivinanzas, retahílas…
- Ejercicios bucofaciales: soplar, mover la lengua, chupar, pronunciar con distintas intensidades, repetir palabras, bostezar, silbar…
- Producir sonidos: de animales, de fenómenos atmosféricos, de la calle, de juguetes…
- Juegos educativos de palabras.
- Juegos tradicionales como el «veo-veo».
- Descomponer palabras en sílabas.
- Buscar el elemento diferente a una serie dada.
- Buscar una letra o una sílaba en una palabra dada.
- Aprender aumentativos y diminutivos.
- Juegos de formas, de colores, de semejanzas (emparejamiento de objetos atendiendo a criterios diferentes).
- Manejar y hojear todo tipo de material escrito.
- Poner al alcance de los pequeños materiales como lápices, folios, cuadernos, colores, gomas…
- Recortar letras.
- Repasar grafismos con el dedo.
- Construir letras con distintos materiales: papel, plastilina, cuerdas…
- Picar grafismos con un punzón.
- Ejercicios de iniciación al dictado.
- Trazar grafismos en el aire, sobre papel, sobre arena, …
- Completar palabras, frases, títulos…
- Trabajar la lateralidad.
- Juegos de orientación espacial.
- Lectura de pictogramas.
- Lectura de imágenes siguiendo la direccionalidad de la escritura y de la lectura.
- Elaboración de carteles sencillos.
- Realizar rompecabezas y dominós.
- Copiado de letras, palabras o frases sencillas.
- Formular preguntas sobre el contenido de un cuento para que vayan desarrollando la comprensión lectora.
- Describir objetos, personajes y situaciones muy cercanas a los niños y a las niñas.
- Etcétera.
Dejemos que los niños y las niñas participen e intervengan en las narraciones, que manipulen cuentos, que den opiniones, que inventen finales y títulos, que pregunten sobre el argumento, darles libertad de elegir sus propios libros.
Todo ello fomentará el gusto por la lectura, estimulará la creatividad y favorecerá el desarrollo global de la persona.
Si tu hijo/a están en el proceso de la lectoescritura te puede interesar la CAJA DE LAS VOCALES y la CAJA DEL ABECEDARIO donde puedes crear actividades jugando con las letras.
¡Hasta pronto familia! Sean felices 😁